La eliminación del timo, una glándula localizada en la entrada del tórax, posibilita la mejoría a quienes padecen de miastenia gravis. Es una intervención quirúrgica aterra hasta al más fuerte, más al saber que para extraer el timo los médicos tienen que hacer una incisión horizontal de 12 centímetros en el tórax y cortar en dos mitades el esternón para abrirlo.
Pero aún con lo estremecedor que es verse sometido a este proceso, los médicos consideran que es la única alternativa para alcanzar la cura o disminuir de forma considerable la intensidad de la enfermedad.
La miastenia gravis es una enfermedad inmunológica que afecta la unión neuromuscular, que es donde se transmiten los impulsos nerviosos a las células musculares para generar movibilidad.
En la miastenia, los anticuerpos, que combaten los virus y las bacterias que entran al cuerpo se confunden y atacan a los receptores de acetilcolina (neurotransmisor distribuido en el sistema nervioso que genera impulsos eléctricos); debido a esta interrupción ya no se genera la contracción de los músculos.
Este fenómeno incide en el tejido muscular estriado, el cual ya no puede contraerse con la misma fuerza como en una persona sana. Esto provoca la debilidad y la fatiga en los pacientes con miastenia.
La excesiva fragilidad en los músculos genera las crisis miasténicas, un estado donde los pacientes no pueden tragar y los pulmones pierden su fuerza, al grado que tienen dificultades para respirar y necesitan asistencia respiratoria artificial.
Para disminuir los problemas generados por la enfermedad o incluso el riesgo de una crisis miasténica se recomienda la extirpación del timo, una cirugía que en la jerga médica llaman timectomía.
En los pacientes con miastenia gravis, el timo se degenera y su estructura puede convertirse en tumores conocidos como timomas.
Cuando esto sucede estimula al sistema inmune en la producción de anticuerpos y éstos comienzan a atacar el cuerpo.
La razón del por qué el mismo cuerpo se ataca se debe a que las células de esta glándula son semejantes a las del músculo estriado y por lo tanto el organismo se confunde y daña las fibras musculares.
Aunque no exista presencia de tumores, si se padece de miastenia gravis se aconseja la remoción del timo, para evitar posibles complicaciones y disminuirlas.
El cirujano toráxico Ronald Rodríguez Hurtado, de origen salvadoreño, explica que ha operado en los últimos pacientes con esta enfermedad; y el 70% ha tenido resultados favorables.
Su porcentaje de éxito es similar a las cifras que se registran en los libros de medicina y los sitios de internet, donde se afirma que el 80% de los pacientes mejora al someterse a una timectomía.
A nivel mundial, la evidencia recolectada por la ciencia sugiere que el 85% de los pacientes con miastenia gravis mejora después de una timectomía, de esta cifra 35% consigue la completacuración y no necesitan más de medicamentos.
Pero también está el otro lado de la moneda, un 30 ó 20% de los pacientes sometidos a la extirpación del timo se les agudiza la enfermedad y puede provocarles una crisis miasténica que se traduce en la pérdida completa de la fuerza muscular.
El paciente salvadoreño William Lopez es una muestra de los buenos resultados obtenidos por el doctor Hurtado. El fue operado cuando tenía 28 años, antes la ingesta de medicinas de este paciente era de cuatro pastillas diarias de mestinón (medicamento que disminuye la debilidad muscular), ahora una sola es suficiente.
Debido a los beneficios potenciales que significa someterse a una timectomía, tal procedimiento es considerado como el tratamiento de elección en todos los pacientes que padecen miastenia gravis,pero que no superen los 55 años de edad, de lo contrario la cirugía es de alto riesgo.
La eliminación del timo, una glándula localizada en la entrada del tórax, posibilita la mejoría a quienes padecen de miastenia gravis. Es una intervención quirúrgica aterra hasta al más fuerte, más al saber que para extraer el timo los médicos tienen que hacer una incisión horizontal de 12 centímetros en el tórax y cortar en dos mitades el esternón para abrirlo.
Pero aún con lo estremecedor que es verse sometido a este proceso, los médicos consideran que es la única alternativa para alcanzar la cura o disminuir de forma considerable la intensidad de la enfermedad.
La miastenia gravis es una enfermedad inmunológica que afecta la unión neuromuscular, que es donde se transmiten los impulsos nerviosos a las células musculares para generar movibilidad.
En la miastenia, los anticuerpos, que combaten los virus y las bacterias que entran al cuerpo se confunden y atacan a los receptores de acetilcolina (neurotransmisor distribuido en el sistema nervioso que genera impulsos eléctricos); debido a esta interrupción ya no se genera la contracción de los músculos.
Este fenómeno incide en el tejido muscular estriado, el cual ya no puede contraerse con la misma fuerza como en una persona sana. Esto provoca la debilidad y la fatiga en los pacientes con miastenia.
La excesiva fragilidad en los músculos genera las crisis miasténicas, un estado donde los pacientes no pueden tragar y los pulmones pierden su fuerza, al grado que tienen dificultades para respirar y necesitan asistencia respiratoria artificial.
Para disminuir los problemas generados por la enfermedad o incluso el riesgo de una crisis miasténica se recomienda la extirpación del timo, una cirugía que en la jerga médica llaman timectomía.
En los pacientes con miastenia gravis, el timo se degenera y su estructura puede convertirse en tumores conocidos como timomas.
Cuando esto sucede estimula al sistema inmune en la producción de anticuerpos y éstos comienzan a atacar el cuerpo.
La razón del por qué el mismo cuerpo se ataca se debe a que las células de esta glándula son semejantes a las del músculo estriado y por lo tanto el organismo se confunde y daña las fibras musculares.
Aunque no exista presencia de tumores, si se padece de miastenia gravis se aconseja la remoción del timo, para evitar posibles complicaciones y disminuirlas.
El cirujano toráxico Ronald Rodríguez Hurtado, de origen salvadoreño, explica que ha operado en los últimos pacientes con esta enfermedad; y el 70% ha tenido resultados favorables.
Su porcentaje de éxito es similar a las cifras que se registran en los libros de medicina y los sitios de internet, donde se afirma que el 80% de los pacientes mejora al someterse a una timectomía.
A nivel mundial, la evidencia recolectada por la ciencia sugiere que el 85% de los pacientes con miastenia gravis mejora después de una timectomía, de esta cifra 35% consigue la completacuración y no necesitan más de medicamentos.
Pero también está el otro lado de la moneda, un 30 ó 20% de los pacientes sometidos a la extirpación del timo se les agudiza la enfermedad y puede provocarles una crisis miasténica que se traduce en la pérdida completa de la fuerza muscular.
El paciente salvadoreño William Lopez es una muestra de los buenos resultados obtenidos por el doctor Hurtado. El fue operado cuando tenía 28 años, antes la ingesta de medicinas de este paciente era de cuatro pastillas diarias de mestinón (medicamento que disminuye la debilidad muscular), ahora una sola es suficiente.
Debido a los beneficios potenciales que significa someterse a una timectomía, tal procedimiento es considerado como el tratamiento de elección en todos los pacientes que padecen miastenia gravis,pero que no superen los 55 años de edad, de lo contrario la cirugía es de alto riesgo.La eliminación del timo, una glándula localizada en la entrada del tórax, posibilita la mejoría a quienes padecen de miastenia gravis. Es una intervención quirúrgica aterra hasta al más fuerte, más al saber que para extraer el timo los médicos tienen que hacer una incisión horizontal de 12 centímetros en el tórax y cortar en dos mitades el esternón para abrirlo.
Pero aún con lo estremecedor que es verse sometido a este proceso, los médicos consideran que es la única alternativa para alcanzar la cura o disminuir de forma considerable la intensidad de la enfermedad.
La miastenia gravis es una enfermedad inmunológica que afecta la unión neuromuscular, que es donde se transmiten los impulsos nerviosos a las células musculares para generar movibilidad.
En la miastenia, los anticuerpos, que combaten los virus y las bacterias que entran al cuerpo se confunden y atacan a los receptores de acetilcolina (neurotransmisor distribuido en el sistema nervioso que genera impulsos eléctricos); debido a esta interrupción ya no se genera la contracción de los músculos.
Este fenómeno incide en el tejido muscular estriado, el cual ya no puede contraerse con la misma fuerza como en una persona sana. Esto provoca la debilidad y la fatiga en los pacientes con miastenia.
La excesiva fragilidad en los músculos genera las crisis miasténicas, un estado donde los pacientes no pueden tragar y los pulmones pierden su fuerza, al grado que tienen dificultades para respirar y necesitan asistencia respiratoria artificial.
Para disminuir los problemas generados por la enfermedad o incluso el riesgo de una crisis miasténica se recomienda la extirpación del timo, una cirugía que en la jerga médica llaman timectomía.
En los pacientes con miastenia gravis, el timo se degenera y su estructura puede convertirse en tumores conocidos como timomas.
Cuando esto sucede estimula al sistema inmune en la producción de anticuerpos y éstos comienzan a atacar el cuerpo.
La razón del por qué el mismo cuerpo se ataca se debe a que las células de esta glándula son semejantes a las del músculo estriado y por lo tanto el organismo se confunde y daña las fibras musculares.
Aunque no exista presencia de tumores, si se padece de miastenia gravis se aconseja la remoción del timo, para evitar posibles complicaciones y disminuirlas.
El cirujano toráxico Ronald Rodríguez Hurtado, de origen salvadoreño, explica que ha operado en los últimos pacientes con esta enfermedad; y el 70% ha tenido resultados favorables.
Su porcentaje de éxito es similar a las cifras que se registran en los libros de medicina y los sitios de internet, donde se afirma que el 80% de los pacientes mejora al someterse a una timectomía.
A nivel mundial, la evidencia recolectada por la ciencia sugiere que el 85% de los pacientes con miastenia gravis mejora después de una timectomía, de esta cifra 35% consigue la completacuración y no necesitan más de medicamentos.
Pero también está el otro lado de la moneda, un 30 ó 20% de los pacientes sometidos a la extirpación del timo se les agudiza la enfermedad y puede provocarles una crisis miasténica que se traduce en la pérdida completa de la fuerza muscular.
El paciente salvadoreño William Lopez es una muestra de los buenos resultados obtenidos por el doctor Hurtado. El fue operado cuando tenía 28 años, antes la ingesta de medicinas de este paciente era de cuatro pastillas diarias de mestinón (medicamento que disminuye la debilidad muscular), ahora una sola es suficiente.
Debido a los beneficios potenciales que significa someterse a una timectomía, tal procedimiento es considerado como el tratamiento de elección en todos los pacientes que padecen miastenia gravis,pero que no superen los 55 años de edad, de lo contrario la cirugía es de alto riesgo.